El crecimiento del crédito interno al sector privado en la década de 2006 – 2016

En busca de crecimiento, las empresas mexicanas han decidido empezar a endeudarse en mayor medida. En México hemos experimentado un aumento constante en el crédito al consumo privado como en el crédito sobre las inversiones, en donde se analiza la última década del crédito y su progreso a través de esta.

Actualmente, el crédito interno al sector privado en su totalidad representa arriba del 34% del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que en 2006 representaba sólo el 19% del PIB, lo que muestra un crecimiento constante “Hay la expectativa… de que podamos llegar a 40 por ciento para 2020.” (Schettino, 2017).

Este crédito parece ser bajo en cuestión de otros países, ya que, como explica Macario Schettino, en Estados Unidos es el 190% de su PIB, Japón mantiene un 180% y Corea 140%. A pesar de la falta de crédito interno anteriormente otorgado, y la falta de confianza a las instituciones financieras, es un gran avance para la economía mexicana.

Según información del Banco de México, el crédito al consumo privado, se concentra el 39% de la cartera de consumo vigente, 24% en créditos de nómina, 20% de deuda al consumo, 13% al consumo en bienes duraderos (El Financiero, 2017).

Un factor importante es la concentración donde se otorgan los créditos, ya que hay un número bajo de instituciones bancarias que ofrecen el servicio de crédito “los siete principales bancos del país, que se conocen como el G7, tienen una cuota de mercado de más del 70% y concentran el mayor número de activos, cuentas, créditos, sucursales e infraestructura” (Leyva, 2014), que afectan la competencia efectiva entre las instituciones, elevando el costo del crédito.

Los aumentos de las tasas de interés volverán al crédito menos accesible en lo que corresponde de los siguientes años, aún así, la tasa de interés interbancaria (TIIE) ha pasado de 2006 a 2016 de 7.36% a 6.86%, mientras que hubo una baja constante de la TIIE entre los mismos, se ha vuelto a repuntar a datos similares.

El porcentaje de crédito solicitado, se ha mantenido de parte de las empresas (ignorando la caída de 2008 y 2009), que ronda en un 70% de solicitantes. De estos créditos, ha incrementado principalmente las tasas de financiamiento de crédito de parte de los proveedores y de los bancos comerciales; el crédito de proveedores creció de 60.4% en 2006 a 76.8% en 2016; los bancos comerciales se denotan con un cambio de 19.7% a 38.8%.

A pesar del aumento de las tasas de interés y las altas tasas de concentración de los créditos, el crédito interno del país ha logrado un avance constante en cuestión de participación de las empresas tanto como del consumo privado a través de la década de 2006 a 2016. Esto genera mejores expectativas de crecimiento en el consumo y la inversión, aun así, esto afectará en parte a las empresas nacionales a largo plazo, ya con un crédito más caro y dificultará el crecimiento a las PYMES.